jueves, 5 de enero de 2012

El discípulo de Socrates


Un discípulo llegó muy agitado a casa de Sócrates, y empezó a hablar de esta manera:
-Maestro, quiero contarte que un amigo tuyo estuvo hablando de ti con malevolencia...
Sócrates lo interrumpió diciendo: "¡Espera! ¿Ya hiciste pasar a través de las tres cercas lo que me vas a decir?".

-¿Las tres cercas?

-Sí –replicó Sócrates- La primera es la VERDAD. ¿Ya examinaste cuidadosamente si lo que me quieres decir, es verdadero en todos los puntos?

-No... Lo oí decir a unos vecinos.

-Pero al menos lo habrás hecho pasar por la segunda cerca que es la BONDAD. ¿Lo que me quieres decir es, por lo menos, bueno?

-No, en realidad no; al contrario...

-¡Ah! -interrumpió Sócrates- Entonces vamos a la última cerca:
¿Es NECESARIO que me cuentes eso?

-Para ser sincero, no; necesario no es.

-Entonces -sonrió el sabio- si no es verdadero, ni bueno, ni necesario... Sepultémoslo en el olvido.

1 comentario:

  1. Antes de que hagas correr un 'chisme' asegúrate que sea verdad, que sea algo bueno y que sea necesario para evitar malentendidos.

    Comentarios sin fundamento suelen ser propagados por quienes no tienen una saneada vida social. Revisa tus fuentes confiables y autoestima.

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